Las clases de yoga llegaron a la Corporación Hogar para brindarles a los niños una conexión con el cuerpo y la mente. Este espacio se integra a las actividades diarias con el fin de permitirles, además de un momento de relajación y paz interior, la adopción de hábitos de vida saludable.
La clase es dirigida por una profesora de Yoga experta en el trabajo con niños, quien ha desarrollado ejercicios de respiración y mantras -vibraciones sonoras- para calmar la mente, asanas –posturas corporales- donde imitan diferentes animales y objetos, juegos de respiración, meditación, relajación e imaginación guiada, mediante estos ejercicios se estimula la concentración, el equilibrio y se fomenta la imaginación, además estas posturas favorecen la diversión, pues la mayoría de estas, les exige involucrar cada parte de su cuerpo a la hora de imitar diferentes animales, plantas y objetos. Dentro de las que identifican y representan están la postura del “árbol”, “león”, “lápiz”, “montaña”, “bailarín”, ”vela”, “tortuga”, entre otras.
La práctica de las posturas les permite a los niños: participar activamente, afrontar retos, trabajar en equipo y encontrar el equilibrio; canalizando sus energías, sus niveles de ansiedad, disminuyendo sus temores y mejorando sus estados de ánimo.